MVZ Esp MCPG Dipl Fausto Reyes Delgado
Hospital Veterinario UNAM-Banfield
Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Cuando se habla de infección de los oídos estamos cometiendo un error, ya que de forma correcta no hay una infección como tal, sino una complicación de la inflamación de los oídos. Incluso esta inflamación no es una enfermedad, es más bien un signo de que algo pasa en la piel de nuestra mascota.

La otitis externa es un signo de que algo pasa en la piel, y el conducto auditivo (siendo piel) responderá a cambios o problemas que se presenten en esta. Curiosamente una de las causas más comunes para la presentación de la otitis es una higiene no adecuada en casa, si se considera que el conducto auditivo de nuestras mascotas es diferente al del humano, no es adecuado el introducir hisopos en el conducto ya que favorecerá un proceso de inflamación.

En el origen de la otitis externa existen factores que son importantes de entender y que hacen que se presente el problema:

1. Factores predisponentes: su nombre lo dice favorecen la presentación del problema. En este caso se tienen defectos anatómicos como anormalidades en el conducto auditivo, defectos en la producción de cerumen, humedad excesiva del conducto y enfermedades como leucemia viral felina o moquillo canino que modifican a los mecanismos de defensa de la mascota.
2. Factores primarios: por si solos pueden producir el problema y aquí encontramos enfermedades hormonales como hipotiroidismo, parásitos como ácaros (causa más común en el caso de gatos) y garrapatas, cuerpos extraños y enfermedades alérgicas.
3. Factores secundarios o perpetuantes: estos no producen el problema, pero hacen más difícil el manejo. Aquí están las bacterias y levaduras.

Considerando lo anterior podemos entender que decir “infección de oídos” no es un término adecuado para el problema que presenta nuestra mascota.

Los signos más comunes en el caso de la presentación de otitis externa son que la mascota sacude constantemente su cabeza y se rasca, produce un olor penetrante y desagradable de los oídos, existe secreción de oídos que puede ir de un color obscuro (café o negro) a claro (verde-amarillo) lo cual dependerá del agente ya sea primario o perpetuante presente. Si nuestra mascota tiene esto signos, es importante asistir de inmediato con el médico veterinario, el cual iniciará el manejo de diagnóstico (hay que recordar que hay varios factores que pueden incluir los signos).

Entre los manejos se encuentra el realizar toma de muestras del oído para comprobar la presencia de bacterias, levaduras, ácaros, etc. y así incluir un tratamiento adecuado, además que nos enseñará como realizar una limpieza adecuada del oído (debido a que también se realizará tratamiento en casa) y no debe quedar duda de este. En ocasiones el realizar una limpieza inadecuada, es suficiente para ser un factor predisponente para la presentación de otitis externa.

El manejo para los oídos incluirá limpieza con productos que rompen los acúmulos de cerumen y que ayudan a eliminar células inflamadas, al terminar la acción de este producto se emplean generalmente medicaciones para el manejo de inflamación y de los factores perpetuantes presentes en las muestras tomadas por el médico veterinario en el consultorio.

Como ayuda a nuestras mascotas, es importante que al realizar su baño, comprobemos que los conductos auditivos queden perfectamente secos. Es importante considerar los posibles factores primarios, donde las enfermedades alérgicas y hormonales son las más comunes para su presentación y mientras se lleve un manejo adecuado de estas, la otitis se encontrará controlada.